Dentro de las técnicas de mantenimiento industrial, el Mantenimiento Productivo Total o Total Productive Maintenance (TPM) busca optimizar la eficiencia del equipo, eliminar paros imprevistos, reducir pequeñas averías y promover el mantenimiento autónomo del operador, involucrando a toda la planta.
La metodología TPM pretende la mejora de rendimientos en los procesos y medios de producción, mediante la implicación concreta del personal que participan en el proceso productivo; combinando las mejores prácticas de la calidad total, el mantenimiento y la gestión de la producción, para lograr un nivel de productividad lo más alto posible.
Estimación de la Eficiencia Global de los Equipos.
La metodología TPM pretende la mejora de rendimientos en los procesos y medios de producción, mediante la implicación concreta del personal que participan en el proceso productivo; combinando las mejores prácticas de la calidad total, el mantenimiento y la gestión de la producción, para lograr un nivel de productividad lo más alto posible.
El nivel de productividad impulsado por la metodología TPM se evalúa con un indicador llamado Eficiencia Global de los Equipos o Overall Equipment Effectiveness (OEE), el cual mide el impacto total que determina la calidad, productividad y disponibilidad en el desempeño de una máquina; y está dada por la relación de la Producción entre la Producción tecnológicamente factible.
El incremento en la productividad genera una rentabilidad más alta, sin embargo, conviene realizar un estudio del grado de utilización de maquinaria antes de ampliar la producción, para evitar limitaciones por un bajo indicador OEE.
En este contexto, la Producción Tecnológicamente Factible es la producción óptima que se lograría si todos los medios de producción funcionaran perfectamente, como la velocidad de producción, la cual es crucial en la industria debido a la competencia y gran demanda de pedidos.
Objetivos del Mantenimiento Productivo Total
Todo el personal de la empresa deberá llevar a cabo el mantenimiento básico de su equipo, maquinaria e instalaciones con la finalidad de reducir las fallas y optimizar los costos; en un área de trabajo limpia, segura y ordenada, con el propósito de alcanzar los objetivos específicos siguientes:
• Optimización de costos • Trabajo en equipo • Cero accidentes | • Mejora continua • Reducción de averías • Reducción de defectos |
Implementación del Mantenimiento Productivo Total.
Antes de implementar el TPM, se deben cuantificar las pérdidas de productividad, basadas en las seis grandes pérdidas: Averías de maquinaria, Reparaciones, Microparadas, Velocidad de proceso menor, Calidad y Puestas a punto.
Posteriormente corresponde medir la OEE, mediante la evaluación de la disponibilidad, rendimiento y tasa de calidad, para identificar las áreas de eficiencia y potencial de mejora e integrar los siguientes pasos:
- Sistema de medición en tiempo real de la productividad en planta.
- Crear brigadas para identificar y disminuir las causas de pérdida de productividad.
- Establecer un sistema de gestión del mantenimiento, eficaz y eficiente.
- Aplicar diferentes técnicas de mejora de productividad.
- Lograr productividades sostenidas con apoyo especializado.
- Sistema de gestión de producción que facilite la mejora continua tanto a corto como a largo plazo.
En conclusión, el Mantenimiento Productivo Total (TPM) es una metodología que busca optimizar la eficiencia del equipo, involucrando a todo el personal en el proceso productivo.
Con el objetivo de mejorar los rendimientos, el TPM combina las mejores prácticas de calidad total, mantenimiento y gestión de la producción para lograr un nivel de productividad alto, medido a través de la Eficiencia Global de los Equipos (OEE).
Incrementar la productividad implica una mayor rentabilidad, pero es fundamental realizar un estudio del grado de utilización de la maquinaria antes de ampliar la producción.
La implementación del TPM requiere cuantificar las pérdidas de productividad, medir la OEE y identificar áreas de eficiencia y potencial de mejora. A través de sistemas de medición en tiempo real, brigadas de identificación de causas de pérdida de productividad, gestión eficiente del mantenimiento y técnicas de mejora de productividad, se logra alcanzar productividades sostenidas y una mejora continua a corto y largo plazo en el sistema de gestión de producción.
En definitiva, el TPM es una estrategia poderosa para optimizar la productividad y lograr resultados excepcionales en las industrias.
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